Llegó la hora
Si en medio del caos mundial ocasionado por un virus mortal en que tantos están siendo afectados, la humanidad no entiende que el Soberano, Omnipotente y Omnisciente Dios es quien tiene la solución para toda crisis y desastre, ¿para cuándo lo van a dejar? Es hora de reconocer que sin tomar a Dios en cuenta es imposible seguir la jornada en esta tierra. ¡Llegó la hora!
La esperanza de muchos: una vacuna que detenga la mortandad y el desequilibrio emocional para seguir cada cual en lo suyo… marcar la historia con los muertos y… los vivos, a seguir como si nada hubiera pasado. Lo triste es que, hoy es coronavirus y mañana será otra plaga tal vez peor y con mayores consecuencias.
¿Estará Dios enjuiciando a los pecadores??? El juicio por causa del pecado ya fue llevado a cabo cuando el mismo Dios en cuerpo de hombre tomó nuestro lugar en la cruz del calvario para librarnos de toda maldición. O sea, que el mayor problema del ser humano, y cuya solución ha estado en la agenda divina por toda la eternidad, ya se resolvió, ya fue consumado… Nada más queda por hacer.
La pregunta es: ¿Por qué entonces la gente sigue ignorando y menospreciando el tremendo sacrificio de amor hecho por Dios para acercarnos a Él? ¿Por qué prefiere la humanidad seguir viviendo apartada del Creador cuando el propósito para el cual fuimos creados es vivir en koinonia y comunión con el Dios que nos creó? Y ésto… para que vivamos de bendición en bendición; para disfrutar de la vida abundante que el Cristo glorioso vino a darnos… para que busquemos su rostro, no solamente en los momentos difíciles, sino, en todo tiempo; caminando de la mano del Amado, hoy, mañana y SIEMPRE. Y… vivir con Él por toda la eternidad.
El refugio en esta crisis sin precedentes para nuestra generación: JESUCRISTO… nada más que buscar. No permitamos que el temor se apodere de nosotr@s. La sangre derramada por el Hijo de Dios tiene poder… “ninguna plaga tocará nuestras moradas.”
ZCR