Espera lo mejor

Espera lo mejor

Son tantas las situaciones que intentan desviarnos del camino seguro y tantos los intereses a los que le damos más atención de lo que debiéramos que no nos apercibimos de los efectos nocivos que ciertas actitudes van dejando en nuestro ser tripartito… arriesgando el bienestar físico, emocional y espiritual. Entonces, como en el caso de Job, llega la turbación, la confusión, el temor…

 “Porque el temor que me espantaba me ha venido y me ha acontecido lo que yo temía. No he tenido paz, no me aseguré, ni estuve reposado; no obstante, me vino turbación.” Job 3:25-26 

Por muchos años una mujer le pedía a su esposo que se asegurara de que todo estuviera bien en la casa, no fuera a entrar algún intruso mientras dormían. Así cada noche, después que se retiraban, el hombre tenía que bajar a inspeccionar cada rincón de su hogar.  Una noche, al bajar malhumorado a hacer la inspección de rutina, se encontró con un asaltante quien le apuntaba con un arma, amenazándolo con dispararle si no le daba todo el dinero en su haber. Al darle el hombre el dinero que tenía, el ladrón se aprestó a huir tan rápido como podía. Entonces el hombre le dijo: Espere, no se vaya, pues hace años que mi esposa me habla de usted, debe conocerla.

Aunque jocosa la historia, es un ejemplo de contratiempos que, en ocasiones se presentan, por vivir esperando malas noticias en vez de pensar y esperar lo mejor de todo y todos. 

“El justo no tendrá temor de malas noticias; Su corazón está firme, confiado en su Dios. Asegurado está su corazón; no temerá…” Salmos 112:7-8

No permitamos que el mundo con sus influencias ni erradas actitudes que asumimos frente a las adversidades nos aparten del reposo que disfrutamos en el Señor. Sea echado fuera el temor que induce a hablar negativamente y esperemos siempre lo mejor, lo que edifica, lo que trae paz.  Sea el corazón purificado para que nuestros pensamientos y nuestro hablar sea conforme a la palabra de vida, pues… “de la abundancia del corazón habla la boca.” 

“Concéntrense en todo lo que es verdadero, todo lo honorable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo bello y todo lo admirable. Piensen en cosas excelentes y dignas de alabanza.” (Filipenses 4:8 NTV) Puestos los ojos en JESÚS, el autor y consumador de nuestra fe…

ZCR

www.elAdmirable.net

Los comentarios están cerrados.