¡Qué bien nos sentimos viviendo la vida de cara al sol, con nada que ocultar! ¡Cuánta paz y gozo supone el ser transparente! El moverse de manera natural haciendo las cosas debidamente y teniendo la verdad como fundamento de vida resulta en una libertad tan plena y placentera que si lo fuéramos a describir con palabras sería sumamente difícil. ¡No hay oro en el mundo que pueda comprar TAL bienestar por andar en la verdad! Y es que… Dios es luz y quienes estamos en Cristo debemos permanecer en la luz y en la verdad.

Podemos comprender a los que se van en contra de la corriente menospreciando el valor de las bendiciones en sus vidas. Simplemente, el vacío interno que con nada han podido llenar los lleva de intento en intento, logrando hacer de ese vacío, uno cada vez más profundo. Es natural que así sea si no han conocido a JESÚS, quien es la Verdad.

Pretendo crear, por lo menos, cierta curiosidad en aquellos que, por la razón que sea y lo cual no me conscierne siquiera tratar de inquirir sobre ello, no se han dispuesto a encaminar sus pasos por la senda más segura y gratificante… la senda de la VERDAD.

El decidir vivir en la pureza de la verdad es honrar al que es la Verdad, resultando en el más hermoso beneficio enviado desde el cielo para los rectos e íntegros, la Libertad. Es la verdad lo que nos hace libres… cual pájaro que escapa de su jaula. Jamás los que han hecho de la mentira su refugio podrán disfrutar de TAL bendición.

Si hasta ahora no has sentido la necesidad de darle un giro a tu vida, considerando la honestidad y la Verdad, te exhorto a que, antes de que te llegue el día malo, te decidas a cambiar de rumbo y puedas disfrutar el resto de tus días en amistad con Dios… en eterna bendición para ti y los tuyos.

En Cristo se vive la diferencia… una vida diáfana, cristalina, transparente, siendo luz en medio de las tinieblas, disfrutando de Libertad y Paz. “El fruto del Espíritu es en toda bondad, justicia y verdad, comprobando lo que es agradable al Señor.” Efesios 5:9-10.

“Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas. Mas el que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios.” Juan‬ ‭3:20-21 

“Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres.” Juan 8:32,36

ZCR
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